Algunos creados en base a la misinformación y otros simplemente una muestra exuberante de creatividad, los mitos abundan en el mundo del vino, y a veces resulta muy difícil separarlos de la ciencia real. Para que a ti no te pase y no te escuchen afirmando que “la tapa rosca solo se usa en vinos de baja calidad”, sigue leyendo!
1) Todos los vinos mejoran con los años: FALSO
No todos los vinos tienen la capacidad ni fueron creados con la idea de una una guarda de varios años. Existen vinos tintos de muy buena calidad como el Beaujolais que, debido a su baja cantidad de taninos, no está pensado para la guarda sino que para el consumo dentro de los 3 a 5 años después del embotellamiento. Lo mismo sucede con la mayoría de los vinos blancos, los que se arruinarían dentro de la botella si no son consumidos dentro un plazo de un par de años.
No existe una regla fundamental para saber qué vinos se pueden añejar y cuales no, pero como guía es posible decir que los vinos de alto contenido tánico y de ácidos funcionan mejor en la guarda, como el Cabernet Sauvignon, el Nebbiolo y el Merlot. Por otro lado, no olvides que guardar los vinos correctamente es tan o más importante que la capacidad de añejamiento de los vinos, así que no lo pases por alto!
2) La tapa rosca se usa en vinos de baja calidad: FALSO
Comparando el corcho y la tapa rosca, ninguno es mejor que el otro, sino que sirven diferentes propósitos. Mientras que el corcho permitirá una mínima oxigenación dentro de la botella (lo que ayuda a los vinos de guarda), la tapa rosca entrega un cierre completamente hermético, lo que funciona perfectamente para los vinos que deben ser consumidos pronto.
A pesar de que en países con culturas vitivinícolas más conservadoras como en Italia o Francia el corcho sigue siendo el cierre preferido, en países del “Nuevo Mundo” es posible encontrar vinos de nivel premium con un cierre de tapa rosca, comprobando así su calidad.
3) Todos los vinos tintos deberían decantarse: FALSO
De la misma manera que no todos los vinos tintos son aptos para la guarda, también es un error el pensar que todos los vinos tintos deben decantarse.
En pocas palabras, decantar un vino sirve para separar los sedimentos que los vinos de guarda pueden haber desarrollado, o para oxigenar vinos intensos y jóvenes que aún no han madurado completamente dentro de la botella. Por ende, en el caso de vinos ligeros o sin sedimento, decantarlos no es necesario (aunque usar el decantador nos hace sentirnos como todos unos expertos!)
4) Mientras más pesada la botella, mejor el vino: FALSO
Una vez más, otro detalle que no tiene ninguna relación con la calidad del vino.
Si bien es cierto que el vidrio es un material costoso y por ende, sentir una botella pesada nos hace intuir que el vino costará más caro, no existe una relación directa entre ninguno de estos puntos. Muy por el contrario, y con el afán de reducir sus emisiones de carbono, muchos productores están eligiendo botellas más ligeras incluso para sus vinos premium, ya que al pesar menos, requieren menos materiales para su fabricación y gastan menos combustible durante el transporte.
5) Las “lágrimas” del vino son una muestra de calidad: FALSO
Éste es otro de los mitos comunes sobre el vino más conocidos.
Las lágrimas o piernas que se forman en las paredes internas de la copa al agitar el vino son una reacción química entre el alcohol y el agua presente en el vino en conjunto con el vidrio de la copa, y no tienen ninguna relación con la calidad de éste. La única información que se puede obtener al observar las “piernas” es una estimación de la cantidad de alcohol en la botella, pero aún así éste es un ejercicio tremendamente inexacto.
6) Vino tinto para la carne, vino blanco para el pescado: FALSO
Éste es probablemente uno de los mitos más comunes y antiguos, y por ende difíciles de evitar. La verdad es que esta regla (y todas las pautas de maridaje que seguimos) son simplemente guías y no verdades absolutas, y la preferencia de cada uno es mucho más importante que “lo que los libros dicen“.
Por ejemplo, el Cinsault o el Pinot Noir son vinos ligeros y frutosos que podrían maridar perfectamente con pescados de sabor intenso, mientras que vinos blancos con carácter como el Vermentino pueden ser la combinación perfecta para un plato de cerdo y verduras.
7) Un vino “varietal” es mejor que un ensamblaje: FALSO
Un vino varietal es uno hecho usando solo un tipo de uva, mientras que un ensamblaje es una mezcla de varias, y aunque en realidad ninguno sea inherentemente mejor que el otro, existen muchas personas quienes creen que los ensamblajes son simples mezclas de vinos de baja calidad que buscan esconder los defectos de las uvas usadas. Tremendo error!
Los ensamblajes hacen todo lo opuesto: Mezclando distintos tipos de uva, los productores buscan resaltar las mejores cualidades de cada una, creando un vino que combine lo mejor de varias cepas. Por ejemplo, uno de los vinos más famosos y que ha recibido más premios en Chile, Coyam de Viña Emiliana, es un ensamblaje de 7 cepas distintas!
8) El vino no es vegano: VERDADERO
Aunque muchos pensamos que el vino es solo uvas, en realidad hay muchos otros productos que se utilizan durante la producción. Uno de ellos es el Isinglass, que detrás de su reservado nombre esconde un gran secreto: Este compuesto se extrae de peces y se utiliza como agente clarificante en el vino, es decir, para ayudar a obtener una apariencia limpia y cristalina. Otros ingredientes usados con el mismo fin son la clara de huevo, la caseína o la albúmina, todos de origen animal (aunque también existen versiones vegetales).
Si bien en estricto rigor ninguno de estos componentes permanece dentro del vino (ya que su función es atrapar los sedimentos y luego ambos compuestos son retirados del vino), el hecho de que la mezcla haya estado en contacto con el vino hace que éste sea un producto no apto para veganos. En respuesta a las demandas del mercado por productos 100% “plant-based”, hoy es posible encontrar vinos que usan clarificantes de origen vegetal, que utilizan otras técnicas para clarificar, o que simplemente embotellan sus vinos saltándose este paso.
9) Una cuchara metálica evita que el vino espumante pierda el gas: FALSO
Quien sea que haya inventado este mito, probablemente ya había bebido más de una botella entera de vino. ¿Cómo sería posible que una cuchara dentro de una botella ayude a evitar la perdida del gas, si el cuello de la botella sigue estando abierto? Jamás lo sabremos. Lo que si sabemos es que este “truco” no sirve, y que es mejor apegarse a otros métodos para mantener tu espumante en buen estado, como los tapones de champaña.
¿Qué otros mitos has escuchado? ¿Cuál es el más común entre tus amigos y familia? Cuéntanos en los comentarios!
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